Si vas a viajar a la Riviera Maya, habrás notado que evitar los grandes hoteles y el turismo enlatado de Playa del Carmen no es nada fácil. En primer lugar, porque te venderán la idea de que organizar una excursión a tu aire es sinónimo de jugarte el cuello.
Y aunque es verdad que en México debes tomar algunas precauciones, con algunos trucos es posible evitar que los megahoteles de todo incluido monopolicen tu viaje y te impidan conocer el verdadero rostro de este lugar paradisiaco.
Conoce las aldeas mayas de la selva
Vivir de la mano de los mayas un acercamiento a sus costumbres y su modo de vida es de las cosas más interesantes que puedes hacer en la Riviera Maya.
Aunque es verdad que estas comunidades están cada vez menos aisladas y más en contacto con el turismo, muchos de estos pequeños asentamientos en la selva siguen manteniendo vivas sus tradiciones más ancestrales.
Si quieres conocerlos de manera más exclusiva y evitar la típica excursión organizada, puedes alquilar un coche o llegar a un acuerdo con un taxista que te lleve personalmente. Así lo hicimos nosotros.
Visita los yacimientos arqueológicos de las antiguas ciudades mayas
Chichen Itzá
Chichén Itzá es uno de las principales ciudades mayas de la península de Yucatán. Además, su templo más famoso, Kukulcáhn, fue reconocido como una de las nueve maravillas del mundo moderno.
En maya, Chichén Itzá significa «boca del pozo de los itzaes», y hace referencia al Cenote Sagrado, el gran pozo natural que los habitantes de la región consideraban una de las entradas principales al inframundo, morada de los dioses de la lluvia.
Tulum
Tulum fue una ciudad amurallada ubicada también en el Estado de Quintana Roo. La mayor parte de los edificios que se aprecian hoy en día fueron construidos entre los años 1.200 y 1.450. En la primera etapa de la colonia española la ciudad todavía estaba habitada, pero a finales del siglo XVI ya no quedaba nadie allí.
Otro de los atractivos de esta zona es que hay una playa cercana, Playa Paraíso, donde podrás nadar viendo las mismísimas ruinas arqueológicas.
Cobá
Cobá es un yacimiento arqueológico de la cultura maya precolombina. Se encuentra en el sureste de México, a noventa kilómetros al este de Chichen Iztá y cuarenta al noroeste de Tulum. Este yacimiento tiene una larga historia de ocupación, que se inició en torno al año 200 antes de Cristo.
Es sorprendente ver cómo aún se mantienen en pie algunas esculturas y los aros de piedra en los que se jugaba a la pelota mesoamericana, un deporte con connotaciones rituales. Se dice que el ganador del juego era protegido por los dioses, y los historiadores no se ponen de acuerdo en si se sacrificaba a los ganadores o a los perdedores. Lo que sí está claro es que no todos sobrevivían al partido.
Báñate en el Gran Cenote
Los cenotes son formaciones naturales de agua dulce exclusivas de la península de Yucatán. Se estima que en la zona hay más de 2.400, y cerca de Playa de Carmen se pueden visitar muchos.
El Gran Cenote se encuentra a casi 4 kilómetros de Tulum, en dirección a los yacimientos de Cobá, y es el más famoso de esta parte del país. Tiene forma de media luna y es de fácil acceso, ya que consta de zonas poco profundas en las que podrás hacer snorkel sin dificultades.
Además, tiene otras partes con grietas más profundas para los buceadores más expertos. Sus aguas transparentes y la parte superior llena de estalactitas son algo que hay que ver.
Importante: Nos explicaron que las estalactitas no deben tocarse, porque la simple materia que recubre nuestra piel puede dañarlas y hacer que se frene su crecimiento.
Haz snorkel en Akumal
Acceder al paraíso de la playa de Akumal es sumamente fácil. Si llevas tu propio equipo de snorkel, solo tienes que entrar al mar y empezar a nadar hasta el arrecife. Las aguas son muy tranquilas, casi como una balsa, así que no vas a tener ningún problema.
Lo más interesante es encontrar a las tortugas marinas, seguirlas con el vaivén del mar y verlas moverse entre las algas. Pero ten en cuenta que la mejor hora para hacerlo es por la mañana temprano.
Si nunca has practicado snorkel, tienes la opción de contratar un tour justo a la entrada de la playa con un equipo que te enseñe. Pero como es un lugar muy tranquilo, de playa abierta sin cavernas ni grandes olas, no es necesario que seas experto.
Derrítete con la auténtica comida mexicana
Hay muchísimas opciones para probar las especialidades mexicanas, que son una auténtica delicia desde nuestro punto de vista. Si tu presupuesto es algo más ajustado, te recomendamos comer unos tacos, unas gringas o unas tortas.
Pero hay dos platos que son muy famosos en la cocina tradicional, que nos encantaron y que probamos en Playa del Carmen. Uno de ellos es la cochinita pibil, compuesto básicamente de carne de cerdo adobada, que tradicionalmente se cocinaba en hojas de plátano y en un horno bajo tierra. También se acompaña con salsa de chile habanero, cebolla morada y, a veces, con naranja agria.
Otro plato muy típico y que fue toda una sorpresa para nosotros es la sopa de lima. Lleva pollo, tiras de tortilla, cebolla, cilantro, ajo y, claro, lima. ¡El sabor es espectacular!
Recorre la selva en moto
Aunque no somos muy amigos de contratar excursiones cerradas, esta fue una excepción que realmente mereció la pena. A Antonio le encantan las motos, así que disfrutó como un niño pequeño desde el momento en que empezó a probarla.
Hicimos un recorrido de media hora con la empresa Aventuras Mayas. Las motos que tienen son para dos pasajeros y, después de familiarizarte con el equipo y su manejo, un guía te va indicando el recorrido.
El terreno es lo suficientemente guay para los pilotos más experimentados, pero igualmente fácil para los principiantes, que podrán conducir a su propio ritmo. Eso sí, debes tener en cuenta que los caminos por la selva son de tierra y hay mucho barro, así que ponte guapo para la ocasión.
Relájate en la Playa de Xcacel
Encontrar lugares como la playa de Xcacel en la franja costera de la Riviera Maya es bastante complicado. Y es que este santuario de tortugas se mantiene virgen, aunque poco a poco va ganando adeptos.
La reserva ecológica está muy protegida, y las palmeras y el manglar han creado un microcosmos de fauna y flora que es muy muy valioso.
La playa de Xcacel es tranquila, aislada y no tan masificada como Playa del Carmen o Akumal, por lo que puede considerarse una de las más exóticas de la Riviera Maya.
Está ubicada a unos 46 kilómetros desde Playa del Carmen y a unos 19 kilómetros antes de llegar a Tulum. Lo mejor para conocerla es alquilar un coche y estar atentos, porque la entrada no se ve muy bien desde la carretera. Otra opción es preguntar en una parada de taxi y negociar el precio.
Y como los atardeceres de la Riviera tienen bastante fama y la luz en México es algo indescriptible, quédate a contemplar el espectáculo gratuito cuando el sol se ponga.
Piérdete por las calles de Playa del Carmen
Playa del Carmen es la ciudad más grande y cosmopolita de la Rivera Maya. Su avenida más transitada, La Quinta, cuenta con una enorme cantidad de restaurantes, cafés, puestos ambulantes y tiendas de artesanía.
Pero si de verdad quieres sacarle el máximo partido a tu visita a la localidad, te recomendamos que te pierdas por sus callejuelas. Descubrirás infinidad de pequeñas platerías, puestos, galerías de arte y rinconcitos con mucho encanto.
Bueno, pues hasta aquí nuestras propuestas sobre qué ver en la Riviera Maya. Espero que te haya gustado tanto este post como a mí escribirlo. Este fue un viaje muy especial para nosotros, ya que estábamos recién casados y lo vivimos con mucha intensidad. ¿Y tú? ¿Por qué motivo has decidido viajar a la Riviera Maya? Cuéntanos un poco más sobre tu viaje y seguimos charlando en los comentarios.
Totalmente de acuerdo! Hace falta salirse de esas jaulas doradas de los hoteles de lujo para procurarse una experiencia más plena en México con toda su cultura y comida maravillosa. Saludos